Si alguna vez hiciste un experimento de ciencia en secundaria o primaria, puedes recordar que los profesores trataban de enseñarnos biología de las maneras más practicas posibles. A veces, nos tocaba disecar una rana, quizá un pez, o en algunas ocasiones, teníamos la semillita, la semillita de frijol. La idea era que teníamos que sembrar una semilla de frijol en un vaso lleno de tierra, idealmente transparente, que cuidaramos y regaramos la semilla hasta que eventualmente miraramos un frijolito salir. Yo en lo personal, no tenía mucha paciencia para ver la semillita crecer, casi siempre llegaba a revisar y decía aun no hay nada. Hasta que un día, al fin, comenzaba a ver el frijolito salir de la tierra, brotando, rompiéndose paso, hacia la luz y así yo podía ver el crecimiento de esta. Y es así que muchas veces nos pasa con muchas cosas de las que oramos o de las que pensamos que no hay nada de respuesta, por eso hoy, vamos a ver unos ejemplos de como la Biblia muestra este crecimiento.
Caso 1: David y Salomon
Salmos 72:10-11
Reina-Valera 1960
10 Los reyes de Tarsis y de las costas traerán presentes;
Los reyes de Sabá y de Seba ofrecerán dones.
11 Todos los reyes se postrarán delante de él;
Todas las naciones le servirán.
Y
1 Reyes 10:1-3
Nueva Versión Internacional
La reina de Sabá visita a Salomón
10 La reina de Sabá se enteró de la fama de Salomón, con la cual él honraba el nombre del Señor, así que fue a verlo para ponerlo a prueba con preguntas difíciles. 2 Llegó a Jerusalén con un séquito muy grande. Sus camellos llevaban perfumes y grandes cantidades de oro y piedras preciosas. Al presentarse ante Salomón, le preguntó todo lo que tenía pensado, 3 y él respondió a todas sus preguntas. No hubo ningún asunto, por difícil que fuera, que el rey no pudiera resolver.
El Rey David compuso el Salmo 72 para su hijo Salomón. Para propósito de esta meditación, vamos a enfocarnos en solo dos versículos, los versos 10 y 11. Al leer el salmo 72 podemos apreciar todo lo que el Rey David quería para su hijo Salomón, y entre estas cosas, él dijo que los reyes de Tarsis y los reyes de Sabá y de Seba le ofrecerían dones. Quizá físicamente David no pudo ver lo que él “oró” para su hijo, pero la semilla que él plantó para su hijo, surgió mucho tiempo después a tal punto, que la honra que llevó la reina de Sabá sigue siendo una de las más comentadas en la Biblia. Puede ser que hayamos pedido algo a nuestro Señor hace mucho tiempo, y esa semilla ya ha sido plantada, si ya has visto la mano de Dios antes, puedes tener por seguro, que esa semilla que plantaste, en algún momento dará fruto. Así que no hay que desfallecer, sino con paciencia y perseverancia esperar en Cristo Jesús, y ver como eventualmente esa semilla da fruto.
Caso 2: 70 años de Israel
Jeremías 25:8-12
Nueva Versión Internacional
8 »Por eso, así dice el Señor de los Ejércitos: “Por cuanto no han obedecido mis palabras, 9 yo haré que vengan todos los pueblos del norte y también mi siervo Nabucodonosor, rey de Babilonia. Los traeré contra esta tierra, contra sus habitantes y contra todas las naciones vecinas, y los destruiré por completo: ¡los convertiré en objeto de horror, de burla y de eterna ruina!”, afirma el Señor. 10 “Haré que desaparezcan entre ellos los gritos de gozo y alegría, las voces del novio y la novia, el ruido del molino y la luz de la lámpara. 11 Todo este país quedará reducido a horror y ruina; estas naciones servirán al rey de Babilonia durante setenta años”.
12 »Pero cuando se hayan cumplido los setenta años, yo castigaré por su iniquidad al rey de Babilonia y a aquella nación, país de los babilonios,[a] y los convertiré en ruina perpetua», afirma el Señor.
Y
Esdras 1
Reina-Valera 1960
El decreto de Ciro
(2 Cr. 36.22-23)
1 En el primer año de Ciro rey de Persia, para que se cumpliese la palabra de Jehová por boca de Jeremías, despertó Jehová el espíritu de Ciro rey de Persia, el cual hizo pregonar de palabra y también por escrito por todo su reino, diciendo:
2 Así ha dicho Ciro rey de Persia: Jehová el Dios de los cielos me ha dado todos los reinos de la tierra, y me ha mandado que le edifique casa en Jerusalén, que está en Judá. 3 Quien haya entre vosotros de su pueblo, sea Dios con él, y suba a Jerusalén que está en Judá, y edifique la casa a Jehová Dios de Israel (él es el Dios), la cual está en Jerusalén. 4 Y a todo el que haya quedado, en cualquier lugar donde more, ayúdenle los hombres de su lugar con plata, oro, bienes y ganados, además de ofrendas voluntarias para la casa de Dios, la cual está en Jerusalén.
Si, a veces pareciera que algunas cosas tardan un poco, pero realmente no es así. Dios ha establecido un tiempo a cumplir y es por eso que es importante ver como la semilla de la Palabra de Dios toma su tiempo para crecer y salir a la luz. En el libro de Jeremías, podemos ver como el profeta anunció la cautividad de Israel, pero también anuncia su liberación. ¿Será que los israelitas en algún momento perdieron la fe en lo que se había dicho o incluso olvidaron la palabra que se les dio? Aquí es donde nosotros podemos meditar y ver la materialización de lo que originalmente fue dicho y sembrado, y lo que los israelitas pudieron observar 70 años después. Ciro, el Rey Persa (ahora conocido como Irán) fue el rey que terminó la cautividad babilónica. La Palabra de Dios se cumplió en el tiempo justo.
Caso 3: Saúl o Pablo
Hechos 9:13-17
La Biblia de las Américas
13 Pero Ananías respondió: Señor, he oído de muchos acerca de este hombre, cuánto mal ha hecho a tus santos en Jerusalén, 14 y aquí tiene autoridad de los principales sacerdotes para prender a todos los que invocan tu nombre. 15 Pero el Señor le dijo: Ve, porque él me es un instrumento[a] escogido, para llevar mi nombre en presencia de los gentiles, de los reyes y de los hijos de Israel; 16 porque yo le mostraré cuánto debe padecer por mi nombre. 17 Ananías fue y entró en la casa, y después de poner las manos sobre él, dijo: Hermano Saulo, el Señor Jesús, que se te apareció en el camino por donde venías, me ha enviado para que recobres la vista y seas lleno del Espíritu Santo.
Y
2 Corintios 11:22-33
Reina-Valera 1960
22 ¿Son hebreos? Yo también. ¿Son israelitas? Yo también. ¿Son descendientes de Abraham? También yo. 23 ¿Son ministros de Cristo? (Como si estuviera loco hablo.) Yo más; en trabajos más abundante; en azotes sin número; en cárceles más; en peligros de muerte muchas veces. 24 De los judíos cinco veces he recibido cuarenta azotes menos uno. 25 Tres veces he sido azotado con varas; una vez apedreado; tres veces he padecido naufragio; una noche y un día he estado como náufrago en alta mar; 26 en caminos muchas veces; en peligros de ríos, peligros de ladrones, peligros de los de mi nación, peligros de los gentiles, peligros en la ciudad, peligros en el desierto, peligros en el mar, peligros entre falsos hermanos; 27 en trabajo y fatiga, en muchos desvelos, en hambre y sed, en muchos ayunos, en frío y en desnudez; 28 y además de otras cosas, lo que sobre mí se agolpa cada día, la preocupación por todas las iglesias. 29 ¿Quién enferma, y yo no enfermo? ¿A quién se le hace tropezar, y yo no me indigno?
30 Si es necesario gloriarse, me gloriaré en lo que es de mi debilidad. 31 El Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, quien es bendito por los siglos, sabe que no miento. 32 En Damasco, el gobernador de la provincia del rey Aretas guardaba la ciudad de los damascenos para prenderme; 33 y fui descolgado del muro en un canasto por una ventana, y escapé de sus manos.
Y el libro de Hechos podemos ver como Ananías tenía duda de acercarse a Pablo, es de nuestra humanidad hablar que el temor puede asomarse cuando sabes alguién ha tenido una reputación muy diferente a lo que Dios te ha dicho. No obstante, en la 2da carta de Corintios podemos ver como Dios usa a su escogido, como su instrumento de justicia y salvación para llevar a otros al camino de la verdad. Y algo más, podemos ver como Dios, suelta una Palabra y esta Palabra entra en acción para cumplir su propósito y enseñarle al apóstol Pablo, que lo que Dios decreta se cumple. Tanto que lo llevaría ante reyes, como que debido a esto mismo Pablo pudo ver que era mejor sufrir, que vivir la vida que antes llevaba.
Si sigues este blog, quizá te preguntas, por que está vez los extractos eran un poco más extensos, bueno, en este caso, algunas veces tenemos que unir lo que Dios dijo en un pasado para verlo materializado en un presente o en algunos casos, verlo cumplirse en un futuro. Lo importante es, que pase lo que pase, Dios siempre cumple su Palabra. Ahora la pregunta es, ¿qué es lo que Dios te ha dicho a ti? O si lo quieres ver de otra manera, ¿qué es lo que Dios ha dicho de ti? En estos pasajes bíblicos, podemos ver, que lo que Dios dice se cumple. Así que debemos guardar nuestra esperanza y nuestra fe en Cristo Jesús, para siempre recordar que es Dios quien tiene la Palabra Final, por eso es el Alfa y la Omega, el Principio y el Fin. Dios ya vió nuestros días, aun antes que nosotros lo experimentáramos. Dios te bendiga.
Si esto te bendijo y te edificó te invito a que compartas esta publicación. Y si aún no has aceptado a Jesús en tu corazón o deseas reconciliarte con Él hoy, te motivo a que lo hagas, y leas la siguiente oración en voz alta:
“Señor Jesús, te pido perdón por mis pecados, pues sé que mis pecados me separan de ti. Yo te reconozco, como mi único, suficiente y verdadero Salvador. Yo rompo, todo pacto, con el mundo, con la carne y con el enemigo. Te doy gracias, por el sacrificio en la cruz, sé que por tu Sangre yo soy limpio/a de todo pecado y hoy tengo un nuevo comienzo. Te pido que, a partir de hoy, tu palabra sea la lámpara a mis pies y que tu Espíritu Santo guíe mis decisiones en todo lo que haga. Amén.”
Y si hiciste esta oración hoy, usa el formulario de contacto, me encantaría saber de ti. Somos una familia en Cristo, estamos aquí para apoyarnos los unos a los otros. ¡Dios te guíe y te guarde!
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