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Solo un poquito...

Nuestros dichos y refranes tienden a ser muy interesantes. Por ejemplo, “cuentas claras conservan amistades,” o “caras vemos, corazones no sabemos,” “el pez por su boca muere,” o “el burro hablando de orejas.” Pero esto me lleva a pensar también en los dichos y frases que decimos para lo cual nosotros queramos dar una excusa. Por decir, cuando sabemos que algo no necesariamente no hace bien o no es bueno para la salud, “si solo es un poquito,” o uno muy popular “una vez al año no hace daño,” y al final cada vez que decimos muy poquito, seguimos ampliando el margen que queríamos dejar para que no nos hiciera daño y terminamos haciendo el poquito del año, por mes, luego por semana, y por último por día. Pero si nos enfocamos en algo que nos dice Dios, venimos a una frase que nos debe hacer un peso primordial a la hora que tomemos decisiones. El día de hoy, meditaremos en algunas ocasiones de las que Dios, habla del poquito y como esto nos afecta en nuestro día.


Caso 1: La levadura como imperfección

 

1 Corintios 5:6-8

Reina-Valera 1960

6 No es buena vuestra jactancia. ¿No sabéis que un poco de levadura leuda toda la masa?(A) 7 Limpiaos, pues, de la vieja levadura, para que seáis nueva masa, sin levadura como sois; porque nuestra pascua,(B) que es Cristo, ya fue sacrificada por nosotros. 8 Así que celebremos la fiesta, no con la vieja levadura, ni con la levadura de malicia y de maldad, sino con panes sin levadura,(C) de sinceridad y de verdad.

 

En los versículos anteriores, en 1 Corintios 5:6-8 nos podemos dar cuenta que debemos de tener cuidado de lo que creemos hacemos mejor que otros y por eso el apóstol Pablo habla de como la levadura leuda o fermenta la masa. Si definimos la levadura como un hongo, que produce la fermentación, podemos interpretar que la levadura hace referencia a impurezas, a una sustancia que desencadena un proceso, que por pequeña que haya parecido, en el momento que toca o es incorporada a otra sustancia, causa una cadena en reacción que transforma lo que ese hongo tocó. Es por esto que el apóstol Pablo hace referencia que debemos deshacernos de todo aquello que pueda contaminar nuestro ser actual y que nos aleje del sacrificio realizado por Cristo. En el versículo 8, podemos observar como Pablo hace referencia a los panes sin levadura, es decir a los panes sin impurezas, haciendo referencia a nuestro ser, y como nosotros debemos caminar en integridad al ser sinceros y verdaderos.


Caso 2: La levadura como detonante


 

Mateo 13:33

Reina-Valera 1960

Parábola de la levadura

33 Otra parábola les dijo: El reino de los cielos es semejante a la levadura que tomó una mujer, y escondió en tres medidas de harina, hasta que todo fue leudado.

 

En otro caso podemos ver como la levadura se uso de una manera distinta en la Biblia, en el caso de la parábola de la levadura en Mateo 13:33 podemos ver como Jesús habló de la levadura como un detonante. Si nos comparáramos a la levadura, en el hecho que nosotros estamos ubicados en diferentes lugares, en un puesto de trabajo, en una escuela, en un barrio, en una ciudad, en una nación, etc. podríamos decir que nos volveríamos los agentes de cambio en donde fuimos ubicados. Si fuésemos como la levadura que la mujer escondió, podríamos hacer una comparación a que nosotros somos agentes de cambio escondidos para el Reino de Dios, posicionados para hacer su voluntad y para esparcir la palabra del Reino de los Cielos en donde sea que estemos. Cuando habla de que todo fue leudado, todo fue transformado, así como cuando Dios espera que cuando haya un cristiano orando, haya un cristiano obrando, y sigamos la gran comisión de esparcir el evangelio de Dios a todas partes.


Caso 3: El Pan Leudado como ofrenda


 

Amós 4:5

Reina-Valera 1960

5 Y ofreced sacrificio de alabanza con pan leudado, y proclamad, publicad ofrendas voluntarias, pues que así lo queréis, hijos de Israel, dice Jehová el Señor.

 

En este caso, miramos como el profeta Amós habla al respecto del pan leudado ofrecido como complemento de la alabanza. Es decir, que hubo un momento que tuvimos que usar un poco de levadura (algo de lo que poseemos) para multiplicar lo que le íbamos a ofrecer al Señor, y como consecuencia dar un producto terminado que sea agradable al Señor. Podríamos decir, que habrán momentos que parecerán de imperfección, quizá parecían de impurezas, cosas que parecían no salir bien, pero en realidad al final nos ayudaron a mejorar lo que somos. Podemos presentar un producto diferente de lo que teníamos antes. Es decir, como ejemplo, si en un pasado no teníamos paciencia, por diversas circunstancias que creíamos no nos iban a servir para algo nos dimos cuenta que fueron un catalizador para poder desarrollar algo diferente en nosotros. Por esto, aquello que creíamos en algún momento que no fue bueno, termina siendo un ingrediente para que nosotros podamos presentarnos ante el Señor con una ofrenda agradable hacia El.


Analizando nuestra meditación de hoy, debemos recordar que es lo que Dios nos dice a través de sus parábolas, enseñanzas, dichos e instrucciones. Porque dependiendo de la situación, podemos estar en un proceso de aprendizaje para dar una ofrenda agradable a Dios o podemos estar contaminándonos con la levadura incorrecta. Pidámosle a nuestro Padre Celestial, que nos guíe para ser las personas que El desea seamos y podamos ser agentes de cambio en el lugar que estamos ubicados.

Si esto te bendijo y te edificó te invito a que compartas esta publicación. Y si aún no has aceptado a Jesús en tu corazón o deseas reconciliarte con Él hoy, te motivo a que lo hagas, y leas la siguiente oración en voz alta:


“Señor Jesús, te pido perdón por mis pecados, pues sé que mis pecados me separan de ti. Yo te reconozco, como mi único, suficiente y verdadero Salvador. Yo rompo, todo pacto, con el mundo, con la carne y con el enemigo. Te doy gracias, por el sacrificio en la cruz, sé que por tu Sangre yo soy limpio/a de todo pecado y hoy tengo un nuevo comienzo. Te pido que, a partir de hoy, tu palabra sea la lámpara a mis pies y que tu Espíritu Santo guíe mis decisiones en todo lo que haga. Amén.”


Y si hiciste esta oración hoy, usa el formulario de contacto, me encantaría saber de ti. Somos una familia en Cristo, estamos aquí para apoyarnos los unos a los otros. ¡Dios te guíe y te guarde!


Nota: Citas bíblicas tomadas de www.biblegateway.com

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